karina a secas.

Un poco de mango
que alegre el día
lo poco que puede
que lo pinte
aunque sea
color
gris melancolía.

Olas azules
que tapen
los grumos,

poetas sin grado
que mandan
un poco de arte
para la virgen
sola y
exiliada.


El resto que queda
para la desesperación
con otras formas
sin inventos
o sin piedad.

Tu pequeña voz
palpita
en mi caminar.
me deteriora
y no es que no quiera,

pero agota.

Estás
prendido del hoy
maldiciendo el pánico de tu muerte.

Estarás en cada temblor
infectando de dolor
el resto de mi cuerpo.

Hacer como ella
caminar,
caminar
hasta el fondo del mar
porque quizá
en el regresar
me esperas.

Es la pasión
que me atrapa
Ojos con luz tenue
que me llevan
y no me devuelven.
No es para contar,
Venimos de la humedad
y la sin razón,
hoy ya no podemos
irnos
lejos
por el mismo camino.
No quedan fuerzas
no hay aire para volar.
Pálpitos fuertes
débiles
insensatos
pensamientos destinados
enamorados
insostenibles.

El fuego
es eso,
hay mucho fuego.

Es tuyo,

todo.

Yo amo
tu adoras.

Somos tu y yo
juntos

siempre.

Yo que tu
bailo.

Tu que yo
río.

Porque tu con yo
es
todo,

todo

es tuyo.

Para hablar

o decir

no hace falta

mas que tragar saliva.

Para entender

tus ojos

tu aliento de ayer

el salto de tus risas

se me necesita a mi.

Quiero hablarte

ahora si

de tiempos

y de espacios

retenidos

necesarios

que hoy en día se encuentran gastados.



Me despido para encontrarte

en el camino

radiante

sin apuros.



Porque son importantes

los tiempos y espacios

pausados

amados

para ser amables

y recompensados.



Como te dije,

te veo pronto

en el camino

radiante

sin apuros

con corazones aliviados.